Skybell, el timbre más moderno con wifi y cámara

Innovación y sostenibilidad

Hace ya años que el ‘Internet de las cosas’ está entre nosotros. Empezó casi como un experimento. Aparecían múltiples objetos cotidianos como tostadoras, friegaplatos, microondas, gafas, relojes; todos conectados y listos para usarse desde nuestro smartphone, ordenador o tableta. Pero es ahora cuando estamos empezando a ver aplicaciones prácticas y útiles que sí solucionan problemas reales y que gracias a los últimos avances en domótica, prometen hacer de nuestra casa tradicional un hogar inteligente, empezando por Skybell, el timbre más modernos con wifi y cámara.

El portero automático en tu bolsillo

Los timbres inalámbricos llevan mucho tiempo en el mercado. Desde 15€ puedes encontrar dispositivos que al ser pulsados, envían una señal al receptor y éste suena para avisarnos de que hay alguien en la puerta. Es el timbre tradicional actualizado a los años que corren. Sin embargo en la era de los smartphones e internet, incluso este tipo de timbres sencillos de usar y de fácil instalación se han quedado desfasados, con lo que la industria ha tenido que mover ficha e innovar una vez más.

Hay que reconocer que la introducción de la cámara en los porteros automáticos de toda la vida, supuso una revolución en este campo. Ahora no solo podíamos escuchar al que llamaba al timbre sin salir de casa, sino que podíamos verlo. Esta tecnología que sin duda está asentada desde hace años, no ha avanzado mucho. La mayoría de los videoporteros son muy básicos. Skybell es probablemente la primera innovación real en los últimos años. Se trata de un pequeño dispositivo que se coloca en la entrada principal, sustituyendo al timbre tradicional. Cuenta con una cámara con un ángulo de visión de 160º, lo que permite tener una perspectiva bastante amplia de la persona que está delante. La lente está preparada para funcionar en condiciones de baja luminosidad, con lo que usarla durante la noche no supondrá un problema. Además, como no podía ser de otra manera, también cuenta con un micrófono y un altavoz, para poder comunicarnos con la persona que está esperando en la entrada.

Pero, ¿qué lo hace diferente de cualquier videoportero moderno? Por supuesto, la conectividad. Skybell cuenta con una aplicación disponible por el momento para iOS y Android, que nos avisará, casi de manera instantánea, de que alguien está llamando al timbre. Al abrir la aplicación, podremos ver directamente la imagen que transmite la cámara y utilizar el micrófono del móvil para comunicarnos. Es especialmente útil en casas grandes (con jardín por ejemplo) donde resulta difícil escuchar el timbre desde fuera. Gracias a esta solución, sólo tendremos que sacar el móvil del bolsillo.

Otra alternativa similar es Doorbot. Este timbre también tiene la funcionalidad de poder usarse desde el móvil pero tiene algunas diferencias. Doorbot puede usarse simplemente con una batería, si no hay posibilidad de llevar el cableado hasta la puerta, además de poder abrir el cerrojo de la puerta directamente desde la aplicación, siempre y cuando se instale junto con la cerradura inteligente Lockitron. Skybell por su parte permite conectarse a la cámara sin necesidad de que alguien llame al timbre, además de contar con un detector de presencia que nos avisará de si hay alguien enfrente de nuestra puerta mucho rato sin llamar al timbre.

La casa conectada: seguridad y comodidad

Este tipo de timbres inteligentes son una vuelta de tuerca más de la domótica del siglo XXI, que pretende ofrecer soluciones reales a los hogares en materia de seguridad y eficacia. El objetivo es dotar a los propietarios de las casas de las herramientas necesarias para que tengan el control total sobre sus viviendas. Puertas y ventanas abiertas, grifos cerrados, temperatura de la estancia, ventilación, etc. En pocos años, las casas nuevas estarán completamente conectadas y subir las persianas manualmente o cerrar una puerta con una llave, nos parecerá cosa del pasado.