Cómo aislar tu casa del frío para poder ahorrar este invierno

Consejos

Con la temporada invernal asomándose, es el momento perfecto para preparar tu hogar y mantener el calor de manera eficiente. Y es que, el invierno no tiene por qué significar una factura de calefacción elevada. Tan solo es necesario adoptar medidas inteligentes y económicas que te permitan enfrentarte al frío de la manera más cómoda posible. 

En este artículo, exploraremos estrategias prácticas y efectivas para aprender a mantener el calor dentro y el frío fuera. No solo descubriremos cómo combatir las inclemencias del clima, sino también de qué modo se puede optimizar el consumo energético y ahorrar en costos.  

¡Te aseguramos que con estos consejos te garantizarás un invierno acogedor y económicamente sensato! 

Siete medidas principales para aislar tu casa del frío este invierno

Enfrentar las bajas temperaturas invernales es más sencillo de lo que parece con estas siete medidas esenciales para aislar tu casa del frío. Ha llegado el momento de prepararse con estas estrategias infalibles para mantener el calor en casa: 

Aislamiento de ventanas y puertas

Invertir en ventanas de alta calidad con un sellado eficiente puede disminuir significativamente las pérdidas de energía en el hogar, llegándolas a reducir hasta un 70%. En particular, las ventanas que cuentan con rotura de puente térmico se destacan como una elección ideal para este propósito.  

Asimismo, considerar materiales aislantes como el corcho, la fibra de vidrio o el poliuretano también contribuye de manera efectiva a mantener el calor interior y minimizar las fugas energéticas. 

Reorganiza los muebles

La disposición del mobiliario desempeña un papel crucial en el consumo de energía necesario para calentar tu hogar. Y es que, la razón radica en que los muebles absorben el calor, restándolo del ambiente circundante. De ahí, la necesidad de contar con una estructura de decoración eficiente. 

Por ello, siempre que se pueda, debemos de alejar los muebles del radiador permitiendo que el aire caliente circule libremente. Este simple ajuste no solo contribuye a la eficiencia térmica, sino que también optimiza el rendimiento del sistema de calefacción. 

Uso estratégico de alfombras

Con la llegada de las bajas temperaturas, así como es recomendable reorganizar el mobiliario para evitar bloquear las fuentes de calor, también es crucial reintegrar las alfombras. Aunque comúnmente se perciban como elementos decorativos, estas piezas desempeñan una función esencial como aislantes térmicos. 

Optar por tejidos naturales, como la lana o el algodón, aportará la calidez necesaria al hogar. Tejidos como el yute o el mimbre, en tendencia y de fácil limpieza, complementan esta función y se adaptan a todas las estaciones del año. 

Además, estas alfombras pueden colocarse en las paredes como tapices, no solo contribuyendo a retener el calor en las habitaciones, sino también transmitiendo instantáneamente una sensación de calidez visual. 

Por último, también es importante que en los meses de invierno se haga uso de cortinas térmicas. Este elemento actúa como barrera adicional contra el frío y conserva la temperatura interior.

Aislar tu casa del frío

Ajusta la temperatura

Mucha gente desconoce este dato, pero por cada grado de aumento en la temperatura interna de una vivienda, el consumo energético, el gasto en calefacción y las emisiones de CO2 también aumentan en un 7%. Esto supone que cada grado adicional de la calefacción puede suponer un gasto extra de hasta 35 euros anuales.  

De ahí la importancia de ajustarse a una temperatura confortable, evitando extremos que impliquen estar en casa como si fuera verano mientras afuera nieva. Para ello, es fundamental el uso de termostatos y programadores, ya que contribuyen significativamente al ahorro energético.  

Lo ideal es mantener la temperatura de tu hogar a 21 grados para disfrutar siempre de una agradable temperatura. 

Apagar el termostato por la noche

Uno de los mitos más extendidos sostiene que mantener la calefacción encendida constantemente evita los costos asociados con encender y apagar el sistema, siendo así la mejor manera de conservar el calor en casa y ahorrar energía. 

Sin embargo, los expertos en energía lo desmienten por completo, ya que aseguran que se gasta considerablemente menos ajustando el funcionamiento de la calefacción según nuestras necesidades. 

Por tanto, la recomendación es apagar la calefacción durante las horas de sueño o cuando no estamos en casa, fortaleciendo las medidas de aislamiento mencionadas en uno de los puntos anteriores. 

Revisión de ventilaciones

Realizar una limpieza oportuna de la caldera no solo resulta en ahorro de combustible, sino que también reduce la generación de residuos. Este mantenimiento preventivo, llevado a cabo antes de la temporada de frío y el uso diario, no solo contribuye a la eficiencia energética, sino que también asegura la seguridad durante su funcionamiento óptimo. 

Sustituye la base del suelo

Aislar el suelo en las viviendas presenta desafíos debido a su contacto directo con el terreno. Sin embargo, existe una solución efectiva: la instalación de materiales aislantes a nivel de la loza. Recomendamos considerar el uso de espumas fenólicas o láminas de poliestireno expandido.  

En el caso de los pisos, las tarimas flotantes y las moquetas también contribuyen a poder disfrutar de una temperatura más agradable en el hogar. 

En conclusión, enfrentar el invierno con eficacia y ahorro energético implica abordar el aislamiento de tu hogar de manera estratégica. Desde la elección de materiales aislantes hasta la implementación de medidas prácticas, como ajustar termostatos. 

Al adoptar estas prácticas para aislar tu casa del frío, no solo disfrutarás de un hogar más acogedor, sino que también reducirás significativamente los costos asociados al consumo de energía en esta temporada invernal. ¡Esperamos que este artículo te sea de ayuda!

Te recomendamos: