El mercado inmobiliario en Europa

Opinión del Experto

elena GalloEspaña ha pasado a ser en estos momentos el tercer país más atractivo de Europa para invertir en el sector inmobiliario, por delante se sitúan tan sólo Reino Unido y Alemania, y nos sigue Polonia ocupando el cuarto lugar, según un estudio realizado por la consultora inmobiliaria CBRE este año 2014.

Si comenzamos a analizar las cuatro capitales de dichos países, nos encontraremos con escenarios distintos:

Mientras en Londres se está alertando sobre una posible burbuja inmobiliaria, donde los precios podrán llegar a subir en 6 años hasta un 40%, Varsovia mantiene una solidez y estabilidad derivada de su maduración en los últimos 3 años, pareciéndose cada vez más a un país de Europa occidental. Por otro lado, en Berlín se está gestando un boom inmobiliario, especialmente en el sector residencial, que hasta se ha convertido en una cuestión política en las últimas elecciones y Madrid pasa de la novena posición en el 2013 a situarse en el 2014 como la segunda ciudad europea preferida para invertir en inmobiliario.

Fruto de la situación económica del país y la estabilización de precios, los inversores extranjeros han pasado de valorar a España como un mercado de riesgo a un mercado de grandes oportunidades.  Si analizamos el informe de ‘Wealth Report 2014’ de la consultora inmobiliaria Knight Frank, descubriremos que el mercado inmobiliario es el que elegirá la mitad de los grandes patrimonios para sus inversiones. Dichas personas dedican un 30% de sus fortunas a su vivienda habitual y segundas residencias. Según el estudio, África será el país donde más crecerá el número de ricos, en concreto, se elevará el número a un 53%, en los diez próximos años, hasta sumar 2.858 fortunas. No obstante, Europa será el que mayor número de personas acaudaladas sume, un total de 73.396, el 34,1% del total. Después se situará Asia, con 58.588 grandes fortunas, un 43% más que a cierre de 2013, y Norteamérica, con 52.536, un 20% más.

Visto este análisis, si Europa será la que mayores fortunas albergue, las inversiones seguirán sucediéndose en los mismos países de siempre, cambiando de posiciones en función de los ciclos económicos que vivan, pero al fin y al cabo, siempre quedándose en Europa. Podremos volver a escribir este artículo y quizás Londres esté en el cuarto en vez de en el primer lugar, pero aparecerá igualmente. ¿Qué piensan ustedes?

Elena Gallo, directora de expansión internacional de Vía Célere