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10 ideas de decoración en paredes blancas
El blanco es un color que por lo general gusta mucho en las casas porque aporta luminosidad y pega con todo. Sin embargo, es probable que si tienes paredes blancas en tu hogar te estén pidiendo a gritos que las llenes un poco de vida, textura y color, por eso te traemos 10 ideas de decoración en paredes blancas.
Y es que, si quieres que tu casa luzca distinta, pero no te apetece ponerte a pintar, debes saber que en la actualidad hay multitud de ideas fáciles y sencillas que pueden servirte de inspiración. Tan solo es necesario que le pierdas el miedo a una pared blanca, lisa y vacía y sepas bien cómo decorarla dándole personalidad y convirtiéndola en el foco de atención.
El reto es conseguir un resultado que aporte estilo a la estancia, por lo que en este artículo encontrarás algunas ideas infalibles para que puedas decorar de manera exitosa una pared blanca y triunfar. ¡Echa un vistazo a todas ellas y lógralo!
10 consejos de decoración en paredes blancas
Enfrentarse a una pared blanca puede ser aterrador. Y es que, lograr el punto intermedio entre no recargarla demasiado, pero que tampoco quede muy vacía, no es tan sencillo como parece. Por ello, para echarte una mano en esta complicada labor, hemos hecho una recopilación de algunas ideas y soluciones decorativas que añadirán al espacio no solo belleza, sino también funcionalidad. Estas son:
Libros y composición sencilla de cuadros
¿Por qué no dar estilo a una pared con una librería práctica? Es un método sencillo de solucionar el almacenaje de algunos libros a la vez que se consigue que la pared blanca se transforme. Intenta no saturar el espacio y, para ello, opta por una estantería baja y cuadros colgados justo encima.
Si tu pared es lo suficientemente grande, puedes realizar una composición a tu gusto de cuadros, pinturas o alguna que otra lámina. Juega con los tamaños y sobre todo con los marcos.
Además, en la librería puedes incluir algún elemento decorativo como algún jarrón o escultura.
Utiliza una obra de arte o un gran cuadro como protagonistas
Sin duda, una pared blanca es una oportunidad de oro para colgar una obra de arte. Es indiferente si es a todo color o abstracta. Y es que, tanto si optas por una obra de arte o por algún cuadro de grandes dimensiones lo que sí puedes tener claro es que es una de las soluciones más sencillas, pero a la vez más espectaculares de decoración en paredes blancas.
El resultado será una inyección de estilo a toda la estancia gracias a la puesta en marcha de una de las grandes tendencias de la actualidad.
Incorpora tapices
Si quieres dar un toque boho-chic a tu pared blanca, te recomendamos que coloques uno o varios tapices hechos con la técnica de macramé. Una forma sencilla de conseguir un resultado relajante y acogedor.
Transforma la pared blanca con molduras
Llena las paredes de volumen y estilo sin saturar con molduras. No ocupan espacio físico ni visual y además aportan una sensación de relieve al espacio. En función de las que pongas, podrás pintarlas de un color diferente para crear contraste.
Una solución sencilla, fácil y económica de dar un toque diferente que puedes atreverte a hacer tú misma.
Haz que tu espacio sea más grande, con espejos
¿Sabías que los espejos multiplican la luz y dan la sensación de lugares más amplios y grandes? Si tienes una pared blanca en una habitación pequeña, esta es una perfecta opción para poner en práctica. Para ello, puedes combinar distintas formas y verás como cambiar notablemente el dormitorio.
Eso sí, en todo espejo ten en cuenta los marcos, ya que son los encargados de aportar un estilo determinado al lugar.
Uso de tiras LED
Si quieres conservar las paredes blancas, pero que se tiñan de algún color en especial en determinados momentos del día, coloca tiras leds en lugares estratégicos, por ejemplo, rodeando algún mueble, en el rodapié, etc.
Jugar con la iluminación nos permite cambiar el color a nuestro gusto sin necesidad de pintar la pared. Opta por aquellas que funcionan con mando a distancia y saca el máximo provecho a tu pared especialmente en momentos determinados del día como puede ser la noche.
Cuelga o inscribe algún mensaje o frase
¿Eres de las personas que tiene alguna frase que le defina o lema el letimotiv de tu vida? Si es así, traslada este mensaje a la pared blanca que necesites decorar. El resultado te encantará. Además, una buena fórmula para ello es apostar por preciosas letras de madera con mucho volumen y que tengan una tipografía y tamaño que te gusten.
Otra opción es echar mano de stickers, escribir con una tira de led o pintar tu frase haciendo tu propia plantilla. ¡Hay un montón de posibilidades y quizá este sea el modo más personalizable de decorar una pared blanca!
Bandejas de fibra
La fibra vegetal o natural (como el mimbre, bambú, yute…) siempre ayudan a dar estilo a una pared blanca. Recurre a bonitas bandejas combinadas como si se tratasen de cuadros. Si eres una persona arriesgada y sin límites, también una opción adecuada para decorar este estilo de paredes puede ser una alfombra de yute. ¿Te gusta esta idea?
Las plantas nunca fallan
Por lo general no solemos pensar en las plantas como un elemento decorativo de las paredes blancas. Sin embargo, es un recurso que cada vez se utiliza más pues da una sensación de naturalidad y frescura aportando un estilo muy personalizado.
Para ello, puedes escoger una composición tipo jardín vertical o tapiz, con plantas que llenen todo un frente. Otra opción es decorar con macetas instaladas en la pared o con soportes.
Cuelga una guirnalda de fotos
Es ideal para decorar una pared blanca en tu zona de trabajo. Para ello, cuelga de una cuerda con pequeñas pinzas de madera las fotos. Además, si en algún momento te aburres de las fotos o no te gusta como queda esta opción de decoración para paredes blancas, siempre la puedes quitar y eliminar sin dejar rastro de ello.
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